CONCURSO DE MICRORRELATOS

IV CERTAMEN DE MICROCUENTOS

MARTÍNEZ MONTAÑÉS DE SEVILLA

Dentro de las actividades programadas por el Equipo del Plan LYB para el curso 2012/2013, se convoca el IV Certamen de microcuentos MARTÍNEZ MONTAÑÉS, dotado con diversos premios y la posible publicación de los trabajos seleccionados. Se pretende impulsar y fomentar la creación literaria y favorecer la lectura y la publicación de los autores noveles.

Se propone una frase que los participantes deberán continuar a modo de microcuento. En este III Certamen las frases son:

- para alumnos hasta 14 años:  "Como un reflejo en el agua del estanque turbio e inmóvil..."
- para alumnos de más de 14 años: "Pero volvía a ser tarde."

La frase final del microcuento ganador de cada categoría será la frase de inicio para los microcuentos del próximo certamen.

EXTENSIÓN: la extensión no podrá sobrepasar las cien (100) palabras (sin incluir la frase de inicio, ni el título).

PARTICIPANTES: a esta convocatoria puede concurrir todo el alumnado escolarizado en este curso que presente microcuentos originales e inéditos, escritos en castellano, que depositará en la Conserjería. Los trabajos irán firmados y con la expresión en letra clara del nombre, los dos apellidos y el curso y la modalidad a la que pertenecen sus autores.

PLAZO DE PRESENTACIÓN: el plazo de admisión termina a las 14’30 horas del 11 de abril de 2013.

PREMIOS: se establecen tres premios, consistentes en diploma, lote de libros y lote de libros y diploma, por cada categoría (hasta 14 años, mayores de 14 años).

JURADO, FALLO y ENTREGA DE PREMIOS: el Jurado estará compuesto por los miembros que Biblioteca y el Departamento de Lengua y Literatura designe. El fallo se dará a conocer públicamente antes de la finalización del mes de abril. La entrega de premios se hará en un acto público durante el mes de mayo de 2013.

DISPOSICIONES FINALES: la participación en la presente convocatoria implica la aceptación de sus bases, que podrán ser interpretadas por el Jurado en aquellos aspectos no previstos en las mismas. El incumplimiento de alguna de sus normas originaría la automática eliminación.

Sevilla, 11 de marzo de 2013

Premio Biblioteca Breve de Seix Barral

Publicado en EL PAÍS.

Regàs obtiene el Biblioteca Breve con una crítica de la posguerra y la Transición

La escritora y exdirectora de la Biblioteca Nacional obtiene el galardón con 'Música de cámara'

La obra narra una historia de amor truncado donde reflexiona sobre la Transición

La posibilidad de enviar los manuscritos vía 'e-mail' aumentó la participación un 297%

CARLES GELI . Barcelona.

Rosa Règas en 2006, cuando era directora de la Biblioteca Nacional. / RICARDO GUTIÉRREZ

No siempre, pero a veces la coherencia y el compromiso en la vida tienen el premio. Así ha ocurrido esta vez con Rosa Regàs (Barcelona, 1933), que ha ganado el premio Biblioteca Breve 2013 con Música de cámara, una novela vestida con la memoria sobre la posguerra, la renuncia de la historia reciente de la transición y la necesaria militancia que debería tener todo intelectual.

Regàs ha asegurado esta mañana que estaba “sobrecogida”. No era, claro, ni por los 30.000 euros de dotación ni por haber obtenido el galardón en la convocatoria más concurrida en la historia de los Biblioteca Breve (1.086 manuscritos, un 297% más que el año pasado gracias a abrir la participación por la vía digital). No, la emoción de Regàs venía porque obtenía el galardón fundado por su admirado Carlos Barral, con el que trabajó en Seix Barral desde 1964 a 1970, siendo ella la “ninfa egregia, una especia de secretaría general con la que todos queríamos hablar”, ha evocado José Manuel Caballero Bonald, asiduo allí por entonces y miembro del jurado que ahora la ha premiado.

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Leer era cosa de hombres

Publicado en EL PAÍS 

Leer era cosa de hombres

Antonia Gutiérrez Bueno, una perfecta desconocida hoy, tumbó en 1837 la prohibición de la Biblioteca

Nacional para aceptar investigadoras y lectoras

 Un templo del saber pagado con juego

TEREIXA CONSTENLA Madrid 

 

Usuarias en la sala de lectura de la Biblioteca Nacional. / CARLOS MONTES (BNE)

Hay que tener una gran confianza para sentarse a un escritorio y, en 20 líneas, pedir la luna. Lo nimio —un agente subversivo, bien usado— está minusvalorado. En 1955 Rosa Parks, con su empecinamiento rebelde para no levantarse de su asiento en un autobús de Alabama,dinamitó la segregación racial en Estados Unidos. Un siglo antes, con su carta de 20 líneas, Antonia Gutiérrez Bueno, cuyo nombre nadie recuerda hoy, sepultó para siempre la discriminación de género que laBiblioteca Nacional (BNE) arrastraba desde su fundación en 1713.

Hay que tener mucha seguridad para resistir las coacciones sin levantarse del asiento o para, una mañana o una tarde de enero de 1837, sentarse a escribir al ministro de la Gobernación para reclamar un imposible. Es bien probable que Antonia Gutiérrez Bueno creyese que si no estiraba la mano no tocaría la luna. Porque eso era entonces la Biblioteca Real, un lugar tan inaccesible para las mujeres como la luna, con la pequeña salvedad de días festivos, cuando las damas podían recorrerla en lo que equivaldría a una visita guiada de la época. Se mira, pero no se toca.